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Trujillo en Línea.-La concejal Rocío Taboada Pilco denunció que funcionarios del Servicio de Gestión Ambiental de Trujillo (Segat) habrían estado presionando a una de las trabajadoras de esta dependencia, y finalmente lograron despedirla, aparentemente, de manera arbitraria.
La regidora aprista denunció que esta trabajadora habría sido despedida por disposición de la gerenta del Segat, Julissa Corteza Becerra, quien decidió separar del cargo a la auxiliar de educación ambiental del Segat, Elizabeth Rázuri.
Lo extraño es que la destitución de la empleada se dio 15 días después que esta denunciara a los funcionarios del Segat por un supuesto hostigamiento laboral en la Comisaría de El Alambre.
La acusación a la que hace alusión la representante del Apra es la que impuso Rázuri el pasado 25 de febrero en la Comisaría de El Alambre. Aquí se indica que a través de un memorando la subgerente del Segat, Rosa Cruz Luperdiga, dispuso el traslado de la trabajadora al Jardín Botánico, documento que se no aceptó recepcionarlo, al asegurar que el cargo al que era promovido no guardaba relación con la plaza que había ganado en abril del 2014. El hecho fue puesto de conocimiento de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil)
Según Taboada Pilco, la denuncia interpuesta por Rázuri habrían conllevado a su destitución del cargo. El hecho fue puesto de conocimiento a través de la Resolución de Gerencia General N° 0086-2015-Segat/GG, emitida el último 18 de marzo, en la que se contempla los informes legales de la evaluación de la contratación de Elizabeth Rázuri.
Aquí se advierte que la contratada por tiempo indeterminado en abril del 2014 “no contaba con título profesional de educación o carreras a fines” al momento de ganar el concurso.
Ante esta situación, la gerenta del Segat Julissa Corteza Becerra, resolvió iniciar la nulidad de la resolución en la que se nombra a Elizabeth Rázuri, como auxiliar de educación ambiental.(La Industria)
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