Trilce, transgredir para cambiar las cosas

Trujillo en Línea.- (Por: Augusto Rubio Acosta).- En las últimas semanas, por razones vinculadas al trabajo, la amistad y la bibliofilia, he tenido el privilegio de tener en mis manos y el gusto de leer y revisar decenas de libros que componen una de las mayores colecciones de la obra bibliográfica de César Vallejo, poeta de todos que será homenajeado –en virtud al 125 aniversario de su natalicio- por la Feria Internacional del Libro de Trujillo que se inaugura este domingo en la plazuela El Recreo.

La solidaridad con el sufrimiento humano, la rebeldía del poeta con la sociedad de su tiempo y la fe en la utopía revolucionaria y la muerte, trasuntan las páginas de ediciones magníficamente conservadas y de poemarios emblemáticos como “Trilce” (1922), proyecto estético vanguardista inédito para su tiempo, el mismo que instaló cambios radicales en el empleo de la forma e irradió la cultura emergente de la época en América Latina, publicación por la cual conservo especial afecto y cariño.

La primera vez que leí “Trilce” fue mediante una edición pirata y pésimamente empastada. Alquilé el libro en los vetustos puestos informales que a mediados de los años ochenta convertían las inmediaciones del mercado Modelo,  en el puerto de Chimbote, en un pandemonio. Ahí, a la salida de la escuela y en las bancas de ese modesto puesto de comercio informal del jirón Espinar, atestado de cordeles con libros y revistas de historietas sujetados por ganchos de ropa, leí con pausa un libro que no entendí sino parcialmente, pero que marcaría a fuego el transcurrir de mis días.

La siguiente vez que me topé con “Trilce” -a finales de los ochenta- fue en la Biblioteca Municipal de mi ciudad; y en las aulas de San Marcos, a inicios de los noventa, donde me prometí utilizar la musicalidad, eufonía y carga simbólica del neologismo para darle nombre a la hija que algún día tendría. Después volvimos a encontrarnos en una muestra de la Universidad Católica a finales de la década pasada. Y aquí en Trujillo, hace años, cuando visitaba la exhibición bibliográfica en la Casa de la Emancipación y la veía con la distancia que la urna de vidrio nos impone.

“El libro ha nacido en el mayor vacío. Soy responsable de él. Asumo toda la responsabilidad. Hoy, y más que nunca quizá, siento gravitar sobre mí una hasta ahora desconocida obligación sacratísima de hombre y de artista: la de ser libre”, manifestó el poeta, satisfecho y convencido de lo que había creado. Sin lamentaciones, ratificó las inquietudes que lo llevaron a su meta, sus deseos de libertad en el más amplio sentido de la palabra.

Las palabras de Vallejo, tiempo después de haber publicado su obra mayor, volvieron a remecerme hace algunas semanas, apenas tuve la primera edición de “Trilce” (Talleres de la Penitenciaría de Lima, 1922) en mis manos. Lo mismo ocurrió ayer cuando me alcanzaron la edición facsimilar de la tesis que nuestro poeta universal sustentó en la por entonces denominada Universidad de La Libertad, en 1915. El vacío en la aceptación de su libro no fue más que la falta de entendimiento que sintió el artista ante la expresión de sus ideas, vivencias y concepciones del mundo y de las cosas, así como la total incomprensión de su estética. Así sucede cuando algo no encaja dentro de los parámetros de la costumbre; transgredir los modelos y el sistema vigentes, la insulsa manera de ver el mundo, fue el rasgo que determinó la revolución del lenguaje impuesto por la obra de Vallejo, autor que cumple 125 años de vigencia y que la Feria Internacional del Libro de Trujillo (que empieza este fin de semana) celebra.

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NOTA BIOBIBLIOGRÁFICA DEL AUTOR

Augusto Rubio Acosta

Escritor, gestor cultural y comunicador social egresado de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Ha publicado tres libros de poesía y cuatro de narrativa, entre ellas "Fraga" (2015), su primera novela. Premio Nacional de Periodismo 2008 (Comisión de la Verdad y Reconciliación Nacional y Consejo de la Prensa Peruana), Premio Nacional de Periodismo 2007 (Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social),el autor fue director del Diario La Industria de Chiclayo entre los años 2011 y 2013. Actualmente, Augusto Rubio es coordinador general de la Feria Internacional del Libro de Trujillo, integra el comité editorial del Fondo Editorial Municipal, es jefe de la Biblioteca Municipal de Trujillo y escribe su segunda novela.